viernes, 26 de noviembre de 2021

Crítica de Kierkegaard a la ciencia y lógica hegeliana en El concepto de la angustia


Kierkegaard propone una Dogmática que contrasta con aquella ciencia hegeliana de talante ideal. Se configura aquí una crítica a la Lógica de Hegel y su movimiento dialéctico, la cual comienza con lo que Kierkegaard considera la más fina de todas las abstracciones: lo inmediato. En este contexto, Kierkegaard se propone tratar el concepto de angustia de una manera psicológica, pero teniendo siempre en mente el dogma del pecado original. La ciencia de la Dogmática no parte de la negación del pecado, sino que lo presupone. La realidad de ese pecado no es referida por Kierkegaard a ninguna ciencia ideal, sino que el pecado es objeto de la predicación, en la cual “el individuo habla como individuo al individuo”, predicación entendida como diálogo socrático. Aquí encontramos uno de los motivos más interesantes de la filosofía existencialista de Kierkegaard: la remisión al individuo en su existencia concreta antes que tomar como punto de partida la subsunción (Aufhebung) de lo inmediato, lo concreto, del individuo histórico y contingente a la Idea o Espíritu, mediante el movimiento de un saber especulativo propio de una ciencia ideal, lo que define a Kierkegaard como uno de los filósofos antihegelianos más relevantes (Westphal, 1997: 101). Para Kierkegaard, con la Dogmática comienza una nueva ciencia y una nueva Ética. Esta Ética se constituye como una ciencia que no niega el pecado ni trata de subsumirlo en exigencias ideales: la nueva Ética presupone la Dogmática, y con ella el pecado original. Aquí no hay un movimiento de arriba-abajo sino de abajo-arriba.

Conferencia: Éxito académico: Administración del tiempo, técnicas de estudio y manejo de emociones.

 






domingo, 21 de noviembre de 2021

Taller de metodología y proyectos de investigación

Cuncluyó el Taller de metodología y proyectos de investigación que inicié en agosto. Fue retador porque se inscribieron alumnos de licenciatura, maestría y doctorado, y por esto mismo muy instructivo y enriquecedor. Se generó amistad y buen compañerismo en estos cinco meses, sabiendo que estábamos todos en el taller por gusto y compromiso propio, generándose hasta una dimensión terapéutica en el camino. Me gustó mucho trabajar con ellos. Volveré a abrir el taller el próximo año en agosto si buscan una brújula en la vorágine y caos de la investigación en licenciatura y posgrado.